La Cuarta Casa, en la astrología occidental, es el ámbito del hogar, la familia, las raíces y los cimientos emocionales. Representa tu origen, tu vida privada y tu base psicológica. Los planetas ubicados en esta casa influyen profundamente en tu sentido de pertenencia, tus experiencias tempranas y en la forma en que te nutres a ti mismo y a los demás. A continuación, comparamos cómo cada uno de los diez planetas principales (Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte, Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón) se manifiesta en la Cuarta Casa.
El Sol en la Cuarta Casa: Identidad arraigada en el hogar
El Sol aquí indica una persona cuyo sentido de identidad está fuertemente vinculado a la familia y su herencia. La vida familiar es esencial para su bienestar, y puede buscar reconocimiento dentro de su familia o aspirar a ser el alma de su hogar. Su confianza y autoexpresión se nutren en entornos privados y familiares.
La Luna en la Cuarta Casa: Profundidad emocional en el hogar
Con la Luna en la Cuarta Casa, la seguridad emocional y los lazos familiares son temas centrales. Estas personas anhelan comodidad y seguridad en su hogar. Su estado de ánimo puede verse influenciado por la dinámica familiar, y el apoyo a los demás es algo natural. Son sensibles a sus raíces y pueden tener un fuerte apego a la tradición.
Mercurio en la Cuarta Casa: Vida familiar reflexiva
Mercurio aporta un enfoque intelectual a los asuntos del hogar y la familia. Estas personas pueden disfrutar de animadas conversaciones en casa, valorar la educación en su familia o mudarse con frecuencia. Reflexionan sobre sus raíces y suelen comunicarse con sus familiares o dedicarse a la escritura o al estudio en casa.
Venus en la Cuarta Casa: Armonía y Belleza en el Hogar
Venus en esta posición resalta el amor por la comodidad, la estética y las relaciones armoniosas en el hogar. Estas personas suelen crear un ambiente hogareño cálido y acogedor, disfrutan de la decoración y valoran los estrechos lazos familiares. El hogar es un lugar de placer, arte y afecto.
Marte en la Cuarta Casa: Entorno familiar dinámico
Marte aporta energía, actividad y, a veces, conflicto al hogar. Las personas con esta posición pueden tener una vida familiar agitada o competitiva y podrían tomar las riendas de los asuntos del hogar. Protegen a sus seres queridos y se esfuerzan por establecer una base sólida.
Júpiter en la Cuarta Casa: Raíces expansivas
Júpiter en la Cuarta Casa simboliza abundancia y optimismo en la vida familiar. Estas personas pueden tener una familia numerosa o diversa, disfrutar del entretenimiento en casa o experimentar la buena fortuna a través de las propiedades. Buscan crecer y ampliar sus cimientos, y el hogar suele ser un lugar de aprendizaje e inspiración.
Saturno en la Cuarta Casa: Fundamentos Estructurados
Saturno aquí aporta disciplina, estructura y, a veces, restricción a la vida familiar. Los primeros años pueden estar marcados por responsabilidades o limitaciones, pero esta posición suele generar un fuerte sentido del deber hacia la familia. Con el tiempo, construyen una sólida base emocional mediante la paciencia y la perseverancia.
Urano en la Cuarta Casa: Vida familiar poco convencional
Urano introduce imprevisibilidad y cambio en los asuntos domésticos. Estas personas pueden tener antecedentes familiares inusuales, mudarse con frecuencia o buscar liberarse de las expectativas familiares. Su hogar suele ser moderno, diferente o un centro de innovación.
Neptuno en la Cuarta Casa: Fundamentos Idealistas
Neptuno convierte el hogar en un lugar de sueños, intuición y, a veces, confusión. Estas personas pueden anhelar una vida familiar ideal o ser muy empáticas con las necesidades de sus familiares. Puede haber una tendencia a la ilusión o al escapismo en los asuntos domésticos, pero también una profunda conexión espiritual o artística con las raíces.
Plutón en la Cuarta Casa: Raíces Transformadoras
Plutón en esta casa aporta intensidad y transformación al entorno familiar. Puede haber profundos secretos familiares o luchas de poder en la infancia. Estas personas se sienten atraídas por comprender sus raíces ancestrales y pueden experimentar cambios significativos en su vida familiar, buscando un renacimiento emocional.



